
Nicolás Maduro aseguró este lunes que Estados Unidos estaría preparando una “agresión” de índole militar contra Venezuela, y afirmó que su gobierno está respaldado por “leyes internacionales” para responder a cualquier ataque.
En las últimas semanas, Estados Unidos desplegó ocho buques en el sur del Caribe como parte de un operativo antinarcóticos. Washington acusa a Maduro de tener vínculos con el narcotráfico y ofrece 50 millones de dólares por su captura.
“Hay una agresión de carácter militar en camino, y Venezuela tiene la facultad legal internacional para enfrentarlo”, señaló el oficialista al referirse a la presencia de barcos estadounidenses en la región.
Durante una rueda de prensa con medios internacionales, Maduro indicó que este despliegue ha deteriorado las vías de comunicación con Estados Unidos.
“Hoy puedo anunciar que las comunicaciones con el gobierno estadounidense se encuentran destruidas por sus amenazas de bombas (…) pasamos de una etapa de relaciones maltrechas a completamente deshechas”, señaló.
No obstante, precisó que aún existe un “hilo básico” de comunicación con el embajador John T. McNamara, radicado en Bogotá.
Desde 2019, Estados Unidos y Venezuela no mantienen relaciones diplomáticas plenas, aunque han retomado ciertos acercamientos a través de delegados para abordar temas como el intercambio de prisioneros y la deportación de migrantes venezolanos.
Críticas a Marco Rubio
Maduro también se refirió al secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, calificándolo de “señor de la muerte y la guerra”.
Horas antes de las declaraciones de Maduro, Rubio aseguró en una entrevista con Fox News que el mandatario venezolano representa “una amenaza directa a la seguridad nacional” de Estados Unidos debido a su presunta implicación en el tráfico de drogas.
La semana pasada, Rubio también calificó a Maduro como “fugitivo de la justicia estadounidense” por la recompensa ofrecida por su captura.
Estados Unidos acusa a Maduro de liderar el “Cartel de los Soles”, acusación que el gobernante venezolano niega. La presencia de buques estadounidenses en el Caribe, según Washington, forma parte de operaciones antinarcóticos.
La semana pasada, Maduro ordenó el despliegue de al menos 25.000 efectivos de la Fuerza Armada en estados fronterizos con Colombia y en la región caribeña. Además, llamó a la Milicia Bolivariana, integrada por civiles, a prepararse ante una posible invasión estadounidense.
El fin de semana, el gobierno denunció que militares estadounidenses a bordo del destructor “USS Jason Dunham” retuvieron durante ocho horas a un buque atunero en aguas del Caribe venezolano.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, también señaló que en agosto Estados Unidos triplicó el despliegue de aviones espía en la región.